MADRID, 01 (SERVIMEDIA)
Cada español gastó de media en seguros 1.347,8 euros en 2022, lo que supone un incremento de 46,6 euros respecto al año previo (+3,5%), con incrementos tanto en el segmento de seguros de vida como de no vida.
En el caso de los seguros de no vida, la densidad se situó en 837,3 euros, con un aumento de 31,9 euros por persona, mientras el seguro de vida el indicador se situó en 510,5 euros per cápita, frente a los 495,9 euros de 2021, según recoge el informe ‘El mercado español de seguros en 2022’, elaborado por Mapfre Economics y publicado por Fundación Mapfre.
Así, la densidad en el segmento de los seguros de vida vuelve a aumentar por segundo año consecutivo y previsiblemente seguirá con esta nueva tendencia ayudados, de nuevo, por las subidas de tipos de interés.
La Comunidad de Madrid, con 1.765 euros por persona, fue la región que más gastó en productos aseguradores en 2022, con lo que adelanta a Cataluña, que ahora pasa al tercer lugar, por detrás también de Aragón. Respecto al año anterior, los madrileños abonaron 111 euros más que el ejercicio anterior.
Además, según este estudio, el volumen de primas a nivel agregado del sector asegurador español en 2022 creció un 4,8%, en un entorno marcado por la recuperación económica y por una inflación que alcanzó niveles no vistos en décadas, según el análisis de Mapfre.
«En este complejo entorno, el crecimiento del negocio asegurador no logró superar el crecimiento de los precios, además de que el proceso inflacionista supuso un lastre para la rentabilidad en el segmento de los seguros de no vida, que pudo ser compensada con el buen comportamiento de la rentabilidad del negocio de vida, tras superar el fuerte repunte de la siniestralidad por la pandemia en los dos años previos», añade el informe.
De cara al futuro, Mapfre prevé que «el entorno de desaceleración de la actividad global, regional y española, con una inflación que también se modera, aunque a menor velocidad, contendrá el crecimiento nominal de las primas No Vida en el entorno del 4,3% entre 2023 y 2025. En términos reales, sin embargo, es previsible un crecimiento real de las primas No Vida cercano al 2% en promedio los próximos dos años».
A su juicio, a diferencia del segmento de los seguros de no vida, en donde las entidades aseguradoras constituyen las únicas proveedoras de protección, en el segmento de los seguros de vida (y en particular en el de los seguros de vida ahorro), las entidades de seguros constituyen solo uno de los actores del mercado.
Por ello, apunta que el cambio en las estrategias de remuneración de ahorro por parte de otros gestores de ahorro en el mercado podría generar cambios importantes en la dinámica de la competencia en un plazo breve y, con esta, una variación sustancial en la demanda de productos aseguradores que funcionan como vehículos de ahorro. Por ello, es previsible que el comportamiento de este segmento sea más errático en los próximos trimestres.